5ed65c43c8dd81a69db412303e04ac6a
1x Ganache à la Rose (ref. 4)
1x Praliné au miel (ref. 10)
1x Praliné Grand Marnier Menthe (ref. 15)
1x Ganache Massepain Menthe (ref. 18)
1x Caramel moka fondant (ref. 20)
1x Ganache au pin (ref. 22)
1x Praliné au miel (ref. 27)
1x Ganache au truffes (ref. 30)
1x T. Ch. Alix - Ganache à la framboise (ref. 38)
1x Ganache spéculoos (ref. 32)
1x Ganache cacao fondant (ref. 40)
1x Ganache au vin de Monbazillac (ref. 33)
1x Gianduja fondant (ref. 42)
3x La strebelle - Ganache gingembre (ref. 37)
1x Praliné croustillant (ref. 45)
1x Crème Manon Fondant (ref. 47)
1x Ganache à la violette fondant (ref. 51)
1x Ganache à la fraise (ref. 55)
1x Ganache thé aux fruits rouges (ref. 56)
1x Ganache Noisettes (ref. 58)
1x Ganache thé Earl Grey (ref. 59)
1x P. Wallost - Ganache massepain nature (ref. 60)
1x R. Rhor - Ganache miel de châtaignier (ref. 61)
1x Cecile Massart - Ganache à la banane (ref. 63)
1x Th. Chotteau - Caramel chocolat (ref. 67)
1x G. Leclek - Caramel orange (ref. 70)
1x Ganache au poivre (ref. 46)
1x Caramel au beurre salé (ref. 49)
1x Ganache pineau des Charentes (ref. 9)
1x Ganache Jasmin (ref. 3)
1x Gianduja Blanc (ref. 7)
1x Praliné de coco (ref. 13)
2x Praliné au café (ref. 14)
1x Ganache moka blanc (ref. 17)
1x Ganache aux noix (ref. 19)
1x Caramel Chocolat (ref. 26)
2x Praliné d’Amande au Café (ref. 28)
1x Praliné noisette et Citron confit blanc (ref. 29)
1x Ganache cannelle (ref. 35)
1x Ganache cacao blanc (ref. 41)
2x Crême Manon (ref. 48)
1x L. Noel - Ganache au thym (ref. 54)
1x Praliné croquant (ref. 57)
1x Ganache brésilienne (ref. 66)
1x Th. Chotteau - Gianduja orange (ref. 69)
1x Ganache à la Cannelle (ref. 24)
1x Caramel Orange (ref. 5)
1x Ganache à la violette lait (ref. 1)
1x Ganache à l'anis (ref. 8)
1x Praliné au riz soufflé (ref. 11)
1x Praliné lait (ref. 12)
1x Ganache cacao lait (ref. 16)
1x Ganache noisette (ref. 21)
1x Ganache réglisse (ref. 23)
1x Ganache à l'orange (ref. 25)
1x Ganache à la noix de muscade (ref. 31)
1x Ganache Café Cognac (ref. 34)
1x Ganache miel de châtaignier (ref. 36)
1x Mysato - Ganache au gimgembre (ref. 39)
1x Gianduja Orange (ref. 43)
1x Ganache à la pistache (ref. 44)
1x Ganache fèves de Tonka (ref. 50)
1x Ganache Moka lait (ref. 53)
1x R. Rhor - Caramel Chocolat (ref. 62)
1x Cecile Massart - Ganache à la cacahuète (ref. 64)
1x Ganache pineau des Charentes (ref. 65)
1x Caramel moka (ref. 68)
Contenido
Chocolate de apariencia crocante que envuelve una deliciosa ganache con violetas de Toulouse. La forma geométrica del praliné remite a la parte superior de la nariz de Julieta.
Al morder el ojo negro de Julieta, se libera todo el sabor fresco de la primavera. El ganache de muguete se derrite en la boca y despierta vuestras papilas gustativas.
Evocando una cabellera rubia resplandeciente, este praliné devela una sutil mezcla de chocolate y jazmín.
El perfume de rosas fue dosificado con precisión por nuestros maestros chocolateros para satisfacer los paladares más exigentes. Los pétalos de rosa de Damasco cristalizados sorprenderán agradablemente la degustación.
Como un beso tierno, la gianduia se funde sobre la lengua para dar lugar a una delicada pasta de avellanas mezclada a una untuosa crema.
Un estimulante del apetito como el anís, hace de este praliné el acompañamiento ideal de los aperitivos. Su aroma delicado e intenso lo ayudará también con los malestares digestivos.
El praliné está animado con movimientos castaños ondulados. El Pineau de Charentes le brinda una dulzura azucarada y sutil reforzada por el chocolate con alto tenor de cacao.
Dentro de un praliné con diseños geométricos muy definidos, se descubre una pasta de avellanas pura y compacta. La misma está aromatizada con miel de una gran variedad de flores.
Este praliné con acentos dinámicos y elegantes contiene una pasta de avellanas pura y compacta, amenizada con arroz inflado para hacerla crocante.
Dentro de un praliné con diseños geométricos muy definidos, se descubre una pasta de avellanas pura y compacta, aromatizada con una fina ralladura de coco.
Este praliné se presenta como un arabesco a la oriental. El chocolate con leche encierra una pasta de avellanas pura y compacta. Su sabor más clásico le permite a usted degustarlo como un placer goloso a lo largo de todo el día.
Este praliné con acentos dinámicos y elegantes contiene una pasta de avellanas pura y compacta. Aromatizado con café, será el acompañante ideal de vuestro desayuno.
Este praliné se presenta como un arabesco a la oriental. El mismo encierra una pasta de avellanas pura y compacta completada por un sabroso licor con ligeras notas de naranja. Se saborea fácilmente como postre (acompañado por un café).
Cuenta la leyenda que el Xocolatl, la lengua de los dioses, era susurrada al oído de Romeo y solo él la comprendía… La intensidad del chocolate se debe a la presencia del polvo de cacao puro que invade el paladar.
El ojo opaco de chocolate blanco envuelve un ganache de moka untuoso, de sabor sutil pero intenso, recordando al célebre y sofisticado café. Este praliné lo acompañará en su pausa de café con dulzura y delicadeza.
La dulzura de la almendra y la intensidad de la menta se unen maravillosamente para formar una mousse untuosa de aromas. La misma se contrasta con la cobertura de un chocolate negro. El perfume embriagante de la menta envuelve el sentido del olfato.
Este delicioso praliné nace de la unión entre lo amargo del cacao y la dulzura de la nuez. El ganache está sembrado de nueces finamente picadas que crujen en silencio al morder.
La fusión entre granos de café y de cacao es muy apreciada. ¡Una erupción volcánica de dos ingredientes torrados en un caramelo que adoramos!
Al morder, el aroma de las avellanas toma literalmente posesión de las narinas. Simultáneamente, todo el sabor de las avellanas se impregna delicadamente en el chocolate para despertar los sentidos
L’homogénéité du fourrage à base de pignon de pin repose sur un équilibre précis du beurre de cacao et de la graine. Son goût prononcé et craquant rappelle celui de l’amande.
Extraído de raíces muy aromáticas, el regaliz endulza naturalmente el ganache firme envuelto en chocolate con leche. El gusto permanece en el borde de los labios...
Fácilmente detectable entre todas las especias gracias a su aroma particular, la canela cautiva el praliné de chocolate blanco y le brinda al ganache un potente gusto.
El sabor naturalmente azucarado del ganache de naranja contrasta con la discreta presencia de la amargura y acidez propias de la fruta. La cobertura del chocolate con leche refuerza aún más su dulzura.
El cuadrado de chocolate blanco envuelve un caramelo blando de sabor aproximado al célebre caramelo duro. La receta del caramelo ha sido mejorada con el agregado de chocolate.
Las papilas se despiertan con una mezcla de pasta de avellanas densa y néctar de flores, equilibrada con un baño de chocolate negro. La textura superficial del praliné remite a un telar de hilos muy ceñidos.
La alianza entre el fruto seco y el grano de café da origen a un armonioso sabor a almendras y café. Cada praliné está firmado con una línea de chocolate con leche que lo convierte en único.
Compuesto por notas ligeramente ácidas, el praliné de avellanas es aún más sabroso y sorprendente. Está envuelto en chocolate blanco con la apariencia de un suave rayo de luz.
La rareza de la trufa es exaltada naturalmente por su alianza con el chocolate negro. El ganache capta los aromas particulares del sotobosque y las avellanas con un diseño en forma de olas.
Los sabores dulces y azucarados del chocolate con leche se equilibran con una pasta de avellanas con nuez moscada, especia muy aromática cuyo gusto se asemeja a la pimienta de Cayena. Todo se funde durante la degustación.
“Explosión de sabores” sería el apodo del dulce achocolatado que envuelve un ganache de speculoos, la galleta y especialidad belga “par excellence”. Su gusto es reforzado por un toque de canela y de azúcar morena.
El relleno espeso de pasta de avellanas presenta sabores azucarados y blandos que nos remiten agradablemente a la miel y a las flores de acacia. El mismo se torna sublime gracias a la cobertura de chocolate negro. El diseño del praliné se caracteriza por la perfección y el espacio exacto entre cada línea.
Durante una degustación, los aromas se descubren poco a poco. El ineludible gusto del chocolate con leche es exaltado por un ganache firme de café. El mismo está enriquecido con un sutil gusto a caramelo. Es el praliné “Crescendo”.
Fácil de reconocer entre todas las especias gracias a su particular perfume, la canela hechiza al praliné de chocolate blanco y le brinda al ganache un gusto intenso.
Los sabores otoñales habitan plenamente este praliné. Las avellanas complementan la miel de castaño brindándole al ganache un sabor a madera, intenso y persistente.
¡El hábito no hace al praliné! El jengibre confitado realza el ganache y le da un gusto ligeramente picante y frutado que contrasta agradablemente con lo amargo del chocolate.
El sabor frutado de la frambuesa potencia el chocolate negro y realza su encanto. El ganache es naturalmente poco azucarado y pulposo.
Le gingembre confit relève la ganache et lui donne une saveur légèrement piquante et fruitée qui se marie délicatement avec le chocolat au lait. Le dessin de la praline a été réalisé par Mysato, une artiste japonaise.
¡El praliné no solo tiene la forma de una mazorca, si no el gusto! Todo remite al chocolate negro. La intensidad achocolatada del ganache se debe a la presencia de polvo de cacao puro que invade el paladar.
¡El praliné no solo tiene la forma de una mazorca, si no el gusto! El relleno de chocolate negro ligeramente amargo contrasta fuertemente con la dulzura del chocolate blanco.
Un verdadero manjar donde los aromas de la gianduia se funden revelando una pasta de avellanas fina mezclada con una untuosa crema.
El chocolate con leche mantiene los aromas de la gianduia con sabores ligeramente amargos y anaranjados. Se derrite en la boca descubriendo una pasta de avellanas fina mezclada con una untuosa crema.
La cobertura de chocolate con leche le agrega un plus al sabor dulce del pistacho. El ganache de sabor intenso, permanece agradablemente en la boca.
El principio del praliné se basa en lo crocante. La pasta de avellanas cruje tanto como el crocante chocolate negro.
El secreto de una buena nuez es sumergirla en un praliné. El aerodinamismo estilizado de este Manón lo vuelve único. El gusto familiar de la nuez, aliado a una voluptuosa nata fresca, no lo dejará a usted indiferente.
El secreto de una buena nuez es sumergirla en un praliné. El aerodinamismo estilizado de este Manon lo vuelve único. El gusto familiar de la nuez, aliado a una voluptuosa nata fresca, no lo dejará a usted indiferente.
Con un sabor similar al almizcle y a la vainilla, las habas de Tonka potencian la sensación del chocolate, refinan su sabor y prolongan el placer.
Una flor de chocolate negro crocante envuelve un ganache esponjoso y sabroso enriquecido por violetas de Toulouse.
El chocolate con leche envuelve un ganache de moka untuoso de sabor sutil y a la vez intenso rememorando al célebre café de alta gama. Este praliné acompañará sus pausas de café con dulzura y delicadeza.
El tomillo realza el ganache de chocolate blanco y le confiere un sabor delicadamente especiado y ligeramente amargo. La misma es intensificada por el agregado de hojas de tomillo.
Es el praliné más grande del surtido. El sabor agridulce de la ganache de fresa se equilibra con la cobertura de chocolate negro. Un placer XL para disfrutar entre dos o ideal para los más golosos.
Cubierto de chocolate negro, la infusión de té de frutos rojos le aporta a este ganache, de tono ligeramente rosado, la perfecta combinación de sabores dulces y ácidos. Es un praliné que acompañará muy bien su desayuno o merienda.
¡Amantes de las avellanas, disfrutad de este praliné a mordiscos! La textura crujiente de las avellanas les ofrecerá un placer máximo.
Al primer mordisco, el aroma de la avellana inunda literalmente el olfato. Al mismo tiempo el sabor de la avellana penetra delicadamente en el chocolate para el despertar de los sentidos.
Cubierto de chocolate negro, la infusión de té Earl Grey le aporta a este ganache, de tono ambarino, un sabor muy intenso. Es un praliné que acompañará muy bien su desayuno o merienda.
De la combinación de almendras y chocolate negro nace un praliné delicioso y agradable al paladar.
Los sabores otoñales fundidos completamente en el praliné. La perfecta combinación de las avellanas y la miel de castaño, aporta al ganache un sabor a madera, fuerte e intenso.
Praliné con cobertura de chocolate con leche y relleno de un delicioso chocolate al caramelo líquido que fluye con cada mordisco. Se funden en la boca como un dulce bombón.
Todo el sabor de la fruta exótica concentrado en un ganache suave y dulce. El praliné sonriente puede degustarse fácilmente como postre, como colofón tras una comida
Los golosos encontrarán aquí su irresistible pecado antes de las comidas. Si el chocolate con leche intensifica el dulzor del ganache al cacahuete, éste sin embargo, se contrasta con un pequeño toque salado.
El chocolate con leche destaca los sabores dulces y sutiles del caldo, combinado con la avellana en un ganache firme.
El aroma de la avellana inunda nuestro olfato, con cada mordisco. Al mismo tiempo, todo el sabor de la avellana penetra delicadamente en el chocolate para despertar los sentidos.
Con cada mordisco, el chocolate al caramelo líquido fluye de manera deliciosa sobre el fino chocolate negro.
La fusión de los granos de café y cacao : una erupción volcánica de dos ingredientes tostados en un caramelo líquido ¡como nos gusta!
El chocolate blanco conserva los aromas de la gianduja, con sabores ligeramente amargos y anaranjados. Se funde en la boca descubriendo una fina pasta de avellanas mezclada en una suave crema.
En cada mordisco, el praliné descubre un delicioso caramelo líquido con un toque delicadamente amargo y anaranjado que fluye sobre el fino chocolate negro.
Si el diseño del praliné sin duda se parece al juego famoso, el ganache de sabores condimentados y picantes sorprende las papilas gustativas, fascinará sin duda los más gourmets.
Los orígenes bretones de la sal de Guérande acoplados a la mantequilla dan un toque de suavidad y de delicadeza al chocolate. El caramelo líquido se derrite en la boca como un dulce suave.
La cobertura crocante del chocolate de líneas depuradas, contrasta con el caramelo líquido enriquecido con toques ligeramente amargos y anaranjados. El caramelo fluye deliciosamente sobre el delicado chocolate blanco.